sábado, 24 de enero de 2015

MIRAR CON OJOS DE NIÑ@

Me emocioné con un vídeo donde habían padres y madres con sus hij@s y estaban haciendo las muecas de gente que aparecían en la pantalla. Cuando sale una niña con una parálisis y hace la mueca, l@s niñ@s la imitan y en cambio l@s padres-madres se quedan con cara de circunstancias. Se llama “Let’s see the difference with the eyes of a child”: Veamos las diferencias con los ojos de un@ niñ@.

Me transporté a aquel verano cuando yo tenía nueve años y mi hermano cinco. Estábamos de viaje en la casa de un@s familiares. Habíamos seguido unos días la vida de un cerdito que tenían mis tí@s en su jardín. Una tarde de verano decidieron que había llegado el día y que lo harían a las brasas. Recuerdo la pena tan grande que pedíamos por favor no os lo llevéis. Recuerdo nuestras caras delante de la bandeja con el cerdito chamuscado. Recuerdo no haber comida nada y sentir una profunda sensación de echarlo de menos.

No creo equivocarme si digo que todos tienen relatos similares.

Cuando tienes la suerte de compartir tu vida con niñ@s, te das cuenta de la sensibilidad que tienen sobre estas cosas. No hay diferencias, tanto se puede querer a un ave, como a un mamífero, como a un reptil-
¡Cómo lloró mi hijo cuando se murió el hámster!
¡Cómo lloró mi vecina cuando vio a su pez flotando!

Hay algún momento en que desconectamos de este sentimiento tan puro de amor hacia todos los seres. 

Recordemos la frase conocida "si pones a un niño en una habitación con una manzana y un conejo, jugará con el conejo y se comerá la manzana".



Ver un trozo de salchicha en el plato, cuando eres pequeño (y no tan pequeño), es como ver un brick de leche, no haces relación con su origen ni con las consecuencias que tiene este alimento en tu plato.

Ojalá algún día los adultos viésemos el mundo con los ojos de un@ niñ@.

Ojalá pronto les dejemos que puedan ver el mundo con sus ojos el tiempo que quieran, sin que nuestra etiqueta «diferente a mi y a los míos" se les pegue.





El experimento de las mamás y los papás y las diferencias que ven:

Niño que descubre de dónde viene el pulpo que tiene en el plato:

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